Preocupaciones del Banco Central Europeo sobre Criptomonedas
El Banco Central Europeo (BCE) ha señalado que la postura favorable hacia las criptomonedas del expresidente de EE. UU., Donald Trump, podría desencadenar inestabilidad sin salvaguardias más robustas en Europa. Actualmente, el BCE y la Comisión Europea se encuentran en un desacuerdo sobre la capacidad de las nuevas regulaciones de criptomonedas en la Unión Europea para enfrentar los riesgos financieros asociados con el potencial regreso de Trump al poder.
Advertencias sobre Contagión Financiera
Según un documento de política obtenido por POLITICO, el BCE advirtió que el apoyo de Trump a la industria cripto en EE. UU. podría provocar una “contagión” financiera, subrayando la necesidad urgente de cambios en la regulación de los Mercados de Cripto Activos (MiCA). El banco central considera que la normativa actual es demasiado permisiva con el modelo de “multi-emisión”, en el cual los emisores de stablecoins europeos y no europeos colaboran conjuntamente.
Modificaciones Necesarias en MiCA
Christine Lagarde, presidenta del BCE, indicó que MiCA requeriría modificaciones, insinuando que la amenaza que representan las stablecoins es “comprendida” por la Comisión Europea y otras instituciones de la Unión. Sin embargo, la Comisión ha rechazado firmemente estas preocupaciones y, en un propio documento también analizado por POLITICO, afirmaron que los riesgos relacionados con dichas stablecoins globales “parecen ser exagerados y son manejables bajo el marco legal actual”.
Interpretaciones Divergentes dentro de la UE
Un funcionario de la UE comentó a POLITICO que las inquietudes del BCE se basan en una “mala interpretación fundamental” de MiCA, y agregó que la idea de una corrida tradicional sobre un activo respaldado uno a uno era “una locura”. Este funcionario también acusó al BCE de “hiperbolizar la amenaza de las stablecoins” para ganar apoyo a su proyecto de euro digital, que se espera sea lanzado en octubre.
Riesgos para la Independencia Financiera de la UE
El BCE teme que un aumento en el uso de stablecoins respaldadas por el dólar, que ya dominan el mercado, pueda desviar capital europeo hacia la deuda de EE. UU., poniendo en riesgo la independencia financiera de la Unión Europea. Asimismo, advirtió que los emisores europeos podrían verse obligados a canjear tanto tokens europeos como extranjeros, lo que podría provocar una “corrida” sobre las reservas.