Resumen del Grupo Lazarus y sus Reservas de Bitcoin
Hace dos semanas, el Grupo Lazarus, la red cibernética criminal de Corea del Norte, mantenía una reserva de 7,813 BTC, valorados en aquel momento en $856 millones. Desde entonces, el grupo ha liquidado aproximadamente 1,938 BTC, lo que representa una pérdida de más de $212 millones en valor. Tras esta reducción, El Salvador ha superado a Pyongyang, reclamando así el título de cuarto mayor tenedor soberano de Bitcoin.
Al momento de redactar este artículo, el Grupo Lazarus posee 5,875 BTC, que ahora tienen un valor de $645 millones, tras la desinversión de 1,938 BTC desde el 12 de mayo. Este cambio coloca a Corea del Norte en el quinto lugar entre los países por reservas de Bitcoin, según datos on-chain de Arkham Intelligence.
Clasificación de Tenedores Soberanos de Bitcoin
Liderando la lista se encuentra Estados Unidos, con un estimado de 198,012 BTC, valorados en $21.72 mil millones a los precios actuales del mercado. El Reino Unido lo sigue con una reserva considerable de 61,245 BTC, actualmente valorados en $6.72 mil millones.
Hace dos semanas, Bután ocupaba el tercer lugar, detrás del Reino Unido, con 12,062 BTC. Aunque el Gobierno Real de Bután sigue reclamando esa posición, sus tenencias ahora se han reducido a 11,879 BTC, aproximadamente valorados en $1.3 mil millones, tras la venta de 183 BTC desde el 12 de mayo.
Impacto de la Desinversión de Corea del Norte
Gracias a la reciente venta realizada por Corea del Norte, El Salvador ha ascendido al cuarto puesto con 6,188 BTC, totalizando $678.55 millones en valor actual. No obstante, las tenencias cripto del Grupo Lazarus no se limitan al Bitcoin (BTC).
Los hackers poseen también $7.84 millones en Tether (USDT) y aproximadamente $7.61 millones en Ethereum (ETH), equivalentes a 2,972 ethers. El destino de los BTC dispersos por el grupo sigue siendo incierto, aunque los analistas de blockchain están dedicados a rastrear este movimiento.
Gran parte de la reserva ha sido enviada en incrementos más pequeños y diseminada entre miles de nuevas direcciones de billetera generadas. Los patrones históricos indican que es probable que estos fragmentos de las monedas robadas permanezcan inactivos durante un tiempo antes de realizar algún nuevo movimiento.