Criptomonedas y Donaciones Políticas
Mientras que países como Estados Unidos exploran las criptomonedas como una nueva herramienta de recaudación de fondos para campañas, los ministros del Reino Unido están sonando la alarma. Uno de ellos, Pat McFadden, un ministro de la Oficina del Gabinete, ha solicitado una prohibición de las donaciones en criptomonedas debido a preocupaciones sobre la trazabilidad y la posible interferencia extranjera.
«El Reino Unido siempre debería mantener su legislación actualizada para garantizar que la financiación de la política sea confiable para el público.»
El martes, McFadden expresó que existe un argumento sólido para prohibir tales donaciones, considerando lo difícil que son de rastrear. Abordó el tema tras una pregunta del miembro del Partido Laborista, Liam Byrne, sobre la prohibición de la recaudación de fondos en criptomonedas. McFadden subrayó la importancia de saber quién está proporcionando las donaciones, si están debidamente registradas y cuáles son las credenciales de esas donaciones.
Divergencias en el Enfoque Global
Mientras las donaciones en criptomonedas han ganado impulso en EE. UU., donde figuras como el expresidente Donald Trump han cortejado abiertamente al sector de activos digitales, la resistencia del Reino Unido refleja una creciente divergencia en cómo los gobiernos abordan la intersección entre criptomonedas y democracia. Tanto McFadden como Byrne coincidieron en que la posible influencia de las criptomonedas en la política podría ser mitigada mediante un mayor financiamiento de la Agencia Nacional del Crimen y la Comisión Electoral del Reino Unido.
Este debate surge dos meses después de que el partido Reform UK, liderado por Nigel Farage, anunciara que se convertiría en el primer partido político en el Reino Unido en aceptar donaciones políticas en Bitcoin. Un grupo de vigilancia anticorrupción sin fines de lucro con sede en el Reino Unido publicó recientemente un informe que advierte que el riesgo de que entidades extranjeras o fondos de origen criminal ingresen a la política del Reino Unido aumenta al permitir donaciones en criptomonedas, señalando que estas podrían contribuir a «futuros esquemas de interferencia política».
Regulaciones Internacionales
El Reino Unido no es el único país que se opone a las donaciones en criptomonedas a partidos políticos. En 2022, Irlanda prohibió todas las contribuciones en criptomonedas a entidades políticas para proteger su democracia de la amenaza de interferencia extranjera. Esta enmienda también abordó la desinformación, los requisitos de transparencia para los partidos políticos y las reglas que rigen las donaciones extranjeras.
En EE. UU., varios estados, incluidos Oregón, Michigan y Carolina del Norte, han prohibido las donaciones en criptomonedas a campañas políticas debido a preocupaciones sobre la trazabilidad, la transparencia y el cumplimiento de las leyes de financiamiento electoral. En 2018, California prohibió las donaciones en criptomonedas, pero esa legislación fue derogada en 2022.
El Salvador, un país que ha adoptado Bitcoin quizás más que ningún otro, no tiene prohibición sobre las donaciones en criptomonedas. Sin embargo, en 2022, un grupo cívico llamado Acción Ciudadana advirtió sobre la falta de supervisión en la financiación política de El Salvador, donde el estatus de Bitcoin como moneda de curso legal podría abrir la puerta a que el crimen organizado o actores extranjeros influyan en las elecciones de manera anónima.
Conclusión
A medida que las donaciones en criptomonedas aumentan a nivel mundial, los legisladores y políticos continúan lidiando con las lagunas regulatorias que exponen los activos digitales. Solo en las elecciones de EE. UU. de 2024, las empresas de criptomonedas gastaron un total de 134 millones de dólares para apoyar a candidatos pro-criptomonedas, alimentando tanto el impulso como la preocupación.