Grupo de Trabajo Transatlántico para los Mercados del Futuro
El «Grupo de Trabajo Transatlántico para los Mercados del Futuro» tiene un plazo de 180 días para presentar propuestas sobre la supervisión de criptomonedas y la reforma de los mercados de capital, poniendo a prueba si dos de los principales centros financieros del mundo pueden alinearse en la tecnología financiera de rápido movimiento.
Según un anuncio del 22 de septiembre, este nuevo grupo de trabajo se formó durante la visita del Secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, a Downing Street, donde se reunió con la Canciller del Reino Unido, Rachel Reeves.
La iniciativa, que surge de una mesa redonda de alto nivel de la industria, encomienda a altos funcionarios de ambos tesoros la presidencia de este esfuerzo. Su mandato es elaborar recomendaciones concretas para sincronizar la regulación de los mercados de capital y los activos digitales, con un estricto plazo de seis meses para informar a través del Grupo de Trabajo de Regulación Financiera Reino Unido-EE. UU.
Objetivos y Colaboración
Según la declaración, uno de los objetivos principales es identificar opciones para la colaboración en activos digitales a corto y medio plazo, reconociendo que la legislación formal en ambas naciones aún está en desarrollo. Al mismo tiempo, el grupo explorará oportunidades a largo plazo para la innovación dentro de los mercados digitales mayoristas, permitiendo a los reguladores abordar las necesidades urgentes de la industria mientras sientan las bases para una infraestructura financiera fundamentalmente nueva.
Notablemente, las recomendaciones del grupo de trabajo «se desarrollarán en estrecha colaboración con socios de la industria», según el anuncio.
Esto asegura que las perspectivas de las bolsas, los gestores de activos y las empresas de tecnología informen directamente el plan de políticas.
Reacciones de la Industria
Coinbase fue rápida en opinar, enmarcando la asociación como fundamental para la próxima etapa de innovación financiera. La bolsa instó a ambos gobiernos a priorizar la tokenización de activos tradicionales, desarrollar un corredor de stablecoin transatlántico y buscar el reconocimiento mutuo de los regímenes regulatorios.
«La asociación Reino Unido-EE. UU. es más que una relación bilateral; es una poderosa fuerza para el progreso. Al trabajar juntos, estas dos naciones pueden liderar el mundo en tokenización, impulsando la innovación, el crecimiento y la inclusión financiera. Coinbase se enorgullece de invertir en esta asociación y ayudar a dar forma al futuro de la economía global», afirmó la bolsa.
Impacto Potencial
Al alinear dos de los mercados de capital más influyentes del mundo, el grupo de trabajo podría establecer un marco global para los activos digitales, superando el actual mosaico de regulaciones nacionales. El éxito de este experimento se medirá por su capacidad para producir un marco que sea tanto innovador como seguro, proporcionando la claridad que las instituciones necesitan para comprometerse plenamente con el espacio de activos digitales.